lunes, 28 de marzo de 2011

Twitter y yo.

Nos costó entendernos (sobre todo a mí), pero ahora somos inseparables.



Me presento: mi nombre es Begoña Ávila (@bavilar), tengo 27 años y soy periodista de formación y creo que de nacimiento también. Recuerdo que ya en 4º de EGB escribía periódicos escolares (que vendía a veinte duros, por cierto), grababa noticias de la prensa en cintas de cassette o incluso, cuando la cámara de vídeo llegó a casa, presentaba a escondidas "supuestos" informativos. Visto lo visto creo que no podría haberme dedicado a otra cosa.

En 2005, y aún estudiando en la Universidad de La Laguna, comencé a trabajar en la Radio Club Tenerife - Cadena SER. La inmediatez, el contacto con el oyente y las posibilidades técnicas que tenía el medio era lo que más me llamaba la atención. Pero algo me hacía intuir que, en la red, las posibilidades se multiplicaban. Así que hace poco más de dos años me abrí una cuenta en Twitter. Entonces no sabía muy bien lo que era, ni para qué servía. Recuerdo la página en inglés, y aunque eso podría no ser un inconveniente del todo, no conocía a gente como Iván Rodríguez (@Twittboy) para que me orientara sobre su funcionamiento; así que me di por vencida y la red ganó el primer asalto.

Fue el pasado mes de septiembre cuando decidí volver a entrar y retomar aquel reto pendiente. Yo ya me había metido en Facebook, y creí que lo oportuno era seguir investigando las redes sociales. Impagable la ayuda que me brindó Marta Rodríguez (@marta_rruiz)  para adentrarme en ese "nuevo mundo" para mí. Lo mejor: me presentó a los #madeincanarias y me acercó a la figura del Community Manager. 

Después de aquella carrera de fondo (hoy más parecida a una marcha atlética, por suerte), tengo claro que la utilidad de Twitter no es una concreta, sino todas las que los usuarios quieran darle y entre sí se permitan. Es tan fácil como seguir (follow) o dejar de seguir (unfollow) a quienes escriben lo que te interesa, o no. Es la comunicación en esencia sin barreras en las distancias, y en tiempo real. Sólo es necesario un seguidor (follower) y un seguido (following). Es algo así como la radio (salvando las distancias). Creo que por eso me gusta tanto.


Por cierto: bienvenid@ a mi blog :)

2 comentarios:

  1. Yo sabía que eras chica (y por partida doble) pero resulta que ¡eres una pibita!

    Bienhallada :)
    @masus

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